Dicen que cuando se va acercar el momento del parto, a las
mamás les llega el síndrome del nido, eso significa que las mamás quieren poner
la casa bonita y limpia, porque su "polluelo" va a venir pronto, y
como es la "visita" que más esperamos queremos que esté todo
perfecto. En verdad al bebé le va a dar igual como de bonita este la casa, lo
único que le importará será que le demos mucho amor y cariño.
La verdad es que la casa esté limpia si es importante porque
nuestro bebé vendrá muy indefenso, por tanto las mamás empezarán a limpiar la
casa a fondo, limpiarán cosas que ni sabían que se podía limpiar...
Y todo esto ¡con una barriga gigante cuando deberían estar
descansando!
Lo importante es tomarlo con calma, porque hay que descansar
y ahorrar energía para el parto. Y sobre todo ¡no cometer locuras! Una caída a
estas alturas puede ser muy peligrosa. Pedir ayuda para lo que no podáis
afrontar solas.
Lo típico que se suele limpiar es:
- El baño hacer una limpieza afondo, azulejos, cajones por
dentro, dejar todo ordenado y en el baño del bebé tener preparado sus útiles de
aseo.
-Cocina, también hacer una limpieza a fondo, limpiar el
horno, la nevera, el lavavajillas, la lavadora, el microondas, los armarios por
dentro...
- Habitaciones, lavar las almohadas, las fundas de los
colchones, los armarios por dentro, las lámparas, lavar los peluches, las
cortinas...
-Salón, cuarto de estar, limpiar las alfombras, lámparas,
cortinas, cojines, fundas de los sofás, armarios por dentro, libros,
estanterías...
Y por último lavar toda la ropita y nuevos enseres del bebé,
ordenando y preparando su habitación. ¡Nunca habréis puesto tantas lavadoras!
¿y vosotras que limpiasteis ante la llegada del bebé?
Shhh, los secretos:
-Tomarlo
con calma, porque es peligroso los sobreesfuerzos y subir a escaleras.
-La limpieza es
importante, pero intentar limpiar como siempre, simplemente lavar más las cosas
del bebé.
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